Paulina y Raúl son un par de hermanos como casi cualquier otro, excepto que entre ellos le han dado vida a un delicioso sonido, pues su combinación entre sintetizadores y percusiones le dan un estilo lo suficientemente moderno para poder ser electrónicos y lo debidamente selvático para estar en lo tropical.
Dando vida a algo así como The XX con ritmos latinos y caribeños. Y es así como desde Salvaje (2015), Salvaje Remixes (2016) y su más reciente LP, Conquistador (2017); han entrado en el gusto de miles de amantes de la música en México, EUA y Europa.
Previo a su próximo concierto el 21 de junio en SALA Puebla, los hermanos Sotomayor en entrevista exclusiva con EXTENSIÓN que nos cuentan sobre las ricas raíces musicales que les han dado vida. Así como sus experiencias musicales, las razones del porqué son mucho mejor apreciados en aquellas tierras nórdicas, así como el significado de sus mezclas sonoras.
¿CÓMO CARAJOS CON UN SONIDO TAN FINO, CADENCIOSO Y SABROSO, NO SUENA EN TOOOODOS LADOS COMO DEBERÍAN Y MEJOR EN EUROPA Y ESTADOS UNIDOS TIENEN 18 PRESENTACIONES Y EN MÉXICO SÓLO TRES?
Raúl (R): Es algo difícil de explicar. De entrada no es algo que nosotros hayamos decidido. O sea, no es que no queramos tocar en México. Pero creo que en México, desafortunadamente, está pasando por un momento medio triste.
Algo de lo que nos dimos cuenta en Europa es que la gente allá no tiene ninguna preocupación; todos tiene trabajo, todos ganan bien, aunque trabajen de meseros…
Paulina (P): …Tienen 30 días de vacaciones, es algo que [acá] no pasa. Creo que cada mes les dan dos días más de asueto. Entonces eso hace que la calidad de vida mejore.
R: Como que su preocupación allá es salir a las cinco-seis de su trabajo e ir a un bar y beber hasta que se haga de noche.
Como que su vida es muy fácil porque casi no tienen preocupaciones y acá no es así. Te tienes que preocupar por si vas a tener chamba al día siguiente, pagar la renta, pagar tus deudas, porque no te asalten en el camión… ¡Por lo que sea!
Es demasiado y es súper triste que esas sean las cosas en las que nosotros estamos pensando, en lugar de preocuparte sólo por vivir y pasártela bien.
P: Excato. Y eso no quiere decir que nosotros creamos que está mejor lo que pasa en Europa o Estados Unidos, amamos México y cada vez que salimos de aquí ansiamos llegar otra vez y tener nuestra vida y nuestra rutina en México porque nos gusta México, nos gusta ser latinos y nos gusta aportarle algo a la escena nacional y aportarle algo a la cultura y al arte. Eso es en lo que estamos enfocados.
¿POR QUÉ INTEGRAR RITMOS LATINOS Y HASTA AFRICANOS A SU MÚSICA?
R: Queremos que la gente que vive en Latinoamérica y que vive en México tenga música con la que se pueda identificar. Porque creo que todos tenemos demasiada influencia de Estados Unidos, entonces es muy fácil que la música suene a eso. Que todos quieran hacer trap que suene a Migos, cantar en inglés, hacer una banda de rock que suene como Radiohead.
Pues otros no queríamos hacer eso, queríamos hacer música en español y no nada más hablar de fiesta sino de cosas un poquito más banales –por decirlo de alguna forma–, y creo que ese objetivo se logra a través de lo nosotros expresamos musicalmente, de esta combinación de percusión con sintetizadores.
No es algo nuevo, no es algo que estemos inventado, pero sí es algo que poco a poco nos ha hecho encontrar nuestro lugar en la escena porque no hay tantas bandas haciendo esto.
Siempre cuento esta historia, de cuando fuimos a McCallen, Texas; y tocamos en un festival pero antes de nosotros tocaron tres bandas de punk, entonces cuando nos subimos a tocar, cumbia y en español, fue súper especial como verles esas caras de ‘¡Qué está pasando!’…
¡¿BAILABAN?!
P: Bailaban muchísimo. Bailaban y gritaban como nunca.
R: Ya después que pudimos platicar con algunos de ellos nos dijeron que es bien difícil para ellos vivir en McCallen porque no saben qué son: No saben si son gringos, si son mexicanos. Que son ‘muy gringos para los mexicanos y muy mexicanos para los gringos’.
Entonces que de pronto llegara una banda como Sotomayor, y les abre los ojos con algo que se puedan identificar. Una banda que habla de lo que ellos viven todos los días.
No les tocaron las bandas tradicionales de cumbia de los 70, pero tampoco pues tampoco se sienten identificados con bandas de pop gringo nuevo, ni con el EDM.
Así que nuestra música les sirvió para sí sentirse latinos, sin que necesariamente eso tuviera que pasarles con el reggaetón.
PORQUE A FINAL DE CUENTAS ESO ES LA MÚSICA, ¿NO? ALGO QUE NOS HACE SENTIR; PUEDE SER TRISTEZA, ALEGRÍA… LO QUE SEA PERO QUE EMOCIONE
P: Exacto.
R: Y justo nosotros tratamos de hacer eso. Que la gente pase un buen momento haciendo música que te ponga de buenas.
Porque creemos que tenemos muchas cosas que aportarle a la sociedad y no necesariamente queríamos hacer música de protesta y hablar de política, no porque no nos interese sino porque creemos que hay otras formas de sobrellevar todas las cosas que nos pasan aquí.
Pero tampoco queríamos hablar de fiesta y culos, y hacer de cuenta que nada pasa. Queríamos hacer música que invite a la unidad, que te permita ver que hay un mundo mejor del que tu crees que estás.
¿QUÉ SIGNIFICA “BOUGARABOU / DJEMBE DUN DUN /BOUGARABOU / DJEMBE DUN DUN”? [CORO DE SU TRACK “AFRIKA”]
P: Son tres tipos de tambores que sólo existen en Senegal. Los cuales esencialmente están hechos de una o más maderas con formas curvas como el de una mujer, con cubiertas de piel de cabra o vaca, a veces con un arillo que le dan toda la tensión para que pueda sonar muy agudo o muy grave. Fue un experimento con esa canción.
R: Sí, queríamos hacer una canción que no necesariamente tuviera letra, que estuviéramos diciendo cosas que sonaban más musicales y pues escogimos estas palabras que en realidad no se entendían pero sí tenían un significado.
Hacer que la voz se integrara como otro instrumento a la canción, que no fuera lo principal.
POR ÚLTIMO, ¿QUÉ DISCOS DE LA INDUSTRIA DISCOGRÁFICA MEXICANA SE LES VIENEN AHORITA MISMO A LA MEMORIA PARA RECOMENDARLES A SUS SEGUIDORES?
R: A mí me gusta mucho el Avalancha de Éxitos de Café Tacvba, que es el primer disco que compré en CD. El Tijuana Sessions, Vol. 3 de Nortec Collective, ese también es un disco que cambió muchísimo mí perspectiva de lo que significaba hacer música mexicana actual.
…¿SIGUEN COMPRANDO DISCOS? ¿AÚN HAY INDUSTRIA DISCOGRÁFICA EN MÉXICO?
R: Pues está ahí medio muriendo pero yo soy un fanático del vinyl…
P: Todavía existe… así como Mix Up que todavía tiene su apartado de música latina y de música nueva, pero la verdad es que ya no hay gente que vaya y compre, eso no quiere decir que ya no existan los CD’s.
Pero es una locura que hasta compras computadoras y ya no tienen como tocarlos, hay que comprar algo más para conectarlo y poder escucharlos. Es algo que ya no se utiliza.
Pero la verdad es que para nosotros sí es bien importante todavía comprar o compartir un CD con una banda, es como tu carta de presentación. Y también hay un montón de bandas que nos regalan sus CDs y es bien chido ir haciendo tu colección. Definitivamente para nosotros sí siguen siendo bien importantes.
Por: Ángel Caballero (@AngelReject)
Fotos: Cortesía Sicario Music