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Minutos antes de las nueve de la noche Ignacio José Fornés Olmo llega al escenario del Pepsi Center del World Trade Center para beneplácito de sus fanáticos.
Quienes a pesar de que no tienen totalmente lleno el recinto; la felicidad, entrega y buena onda de todos y cada uno, logran el ambiente idea para que el rapero español más querido en México deje todo en el escenario.
Es así como después de su primera canción, “Ahora” del álbum A Través de Mi, Nach suelta las primeras palabras de amor a sus seguidores aztecas: “A México llegué por primera vez en el 2008… el Cuervo Salón… el Metropólitan… ¡Todos los conciertos que he dado aquí se me quedan grabados porque ustedes están bien putos locos!”.
Y prueba de ello es la histeria que se suelta y no cesa con “Urbanología”, aunque disminuye un poco por la cadencia de “Los Dos Lados Del Telón”.
Minutos después llega el primer invitado especial de Nach al Pepsi Center; el rapero mexicano Akil Ammar, entra a escena junto sus “Policías En Helicóptero” y el público lo ovaciona con todo el amor hiphopero posible. Mientras que Nach lo abraza y saluda con todo cariño y seguramente hasta admiración.
“¿No sé qué sería de mi si no estuviera aquí en este momento. Si el hiphop no me hubiera salvado la vida”, testifica este raper español, uno de los más longevos de su país así como uno de los más admirados en el mundo del hip hop, antes de interpretar “El Idioma De Los Dioses”.
En “Todo O Nada” otra grata sorpresa nos espera, Hispana, talentosísima rapera jalisciense, acompaña a Nach sobre el escenario para interpretar un pedazo de su gran canción “La Mexicana”, y terminar lo que resta de la canción que originalmente es junto a otra leyenda del hip hop en España, Kase.O.
Las emociones siguen al rojo vivo, con variedad de intensidad frente a grandes rimas como “Efectos Vocales”, “Amor Libre”, “Palabras”, “Basado En Hechos Reales” y “Pensando En Voz Alta”; las cuales hacen un recorrido por prácticamente todos sus álbumes, desde el más reciente, Almanauta, hasta Poesía Difusa.
Fermín IV recupera algo de la grandeza que lo caracteriza pero que el cristianismo le ha estado quitando, cuando aparece en la tarima para rifarse con unos versos en la confrontativa “Nada Ni Nadie”.
Por su parte “Vida Real”, “Ser O No Ser”, “Ellas”, “Anochece” y “Leyenda”; brindan rimas tan intensas, melancólicas y esperanzadoras, que hasta los niños y niñas aquí presentes sienten profundamente… o al menos eso reflejan sus ojos y caras levantadas al escenario cuya mirada no deja escapar casi ningún movimiento de Nach.
“Rap Bruto” inicia y de repente Aczino hace su aparición estelar en medio de la canción para modificar, muy a su modo, la parte que originalmente es de Residente. Mientras que todo el mundo escucha atento y alaba los punchlines que este rapero oriundo de Ciudad Nezahualcóyotl, suelta en el mic.
Para concluir todo “Manifiesto” y la última parte de “Efectos Vocales” dan cerrojazo final a una noche llena de poder, amor, actitud y poesía en forma de rap y hip hop, que si bien fueron creadas por un español ya pertenecen a México y el mundo entero.
Por: Ángel Caballero (@AngelReject)
Fotos: Cortesía Ocesa (César Vicuña)
