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Franz Ferdinand, banda proveniente en Glasgow, Escocia, nacidos en el 2001 pero con su primer álbum de estudio en 2004, festejaron 21 años de carrera con un concierto memorable en ‘El Domo de Cobre’. Y prueba de ello es la crónica que te dejamos a continuación.
Audrey, Alex, Bob, Dino y Julian pisan el escenario del Palacio de los Deportes a las 21:07 horas, y con “No You Girls” ponen de pie a toda su fanaticada. Que pese a no tener totalmente lleno el recinto, sí empiezan a cantar y corear con ganas de inmediato.
“¡Muchas gracias! ¡Buenas noches, México! ¿Cómo estáááán?”, son las primeras palabras que la voz principal de Franz Ferdinand da a su gente antes de interpretar una de sus más recientes canciones, “Curious”; la cual es gratamente recibida.
La dolorosa balada-rock, “Walk Away”, pone el primer toque de romanticismo de la noche. Perfecta para todos esos que traemos el corazón roto, fruto de una (o varias) relaciones fallidas.
Proveniente de su álbum de 2013, Right Thoughts, Right Words, Right Action; “Evil Eye” le pone mucho más indie rock a la velada, seguida de la energética “Right Action”.
Pero es hasta “Do You Want To” que al fin se deja sentir todo el poder de estos escoceses y su público mexicano. Sobre todo un pequeño grupo en las primeras filas de la plancha del Palacio que, se nota desde lejos, que están dándolo absolutamente todo y no dejan de saltar intensamente.
Después de “Stand on the Horizon” Alex Kapranos lee en voz alta un cartel que le arrojan al escenario: “Gracias por salvar mi vida desde 2004”. Acto seguido “The Dark of the Matinée”, con sus inconfundibles cambios de ritmo y grandes batacazos, revela también a los más fieles y longevos fans de Franz, pues la gozan intensamente de principio a fin.
Los que tienen el nombre del Archiduque cuya muerte desató la 1ª Guerra Mundial, Franz Ferdinand, tienen cautiva a su gente. Prueba de ello es que la felicidad innata de “Always Ascending” y “Glimpse of Love” (gracias principalmente a sus toques ochenteros) pone a bailar a parejitas, grupos de amig@s, hombres y mujeres por igual.
“Lucid Dreams”, proveniente del Tonight de Franz Ferdinand de 2009, cuya letra llena de romanticismo, futurismo y uno que otro viaje psicodélico, por momentos nos pone en la gloriosa novela Un Mundo Feliz de Aldous Huxley.
Con un breve pero fantástico sólo de batería de Aubrey, “The Fallen” continúa sacando el lado más rockero del público mexicano de estas leyendas del rock, no sólo de Escocia sino ya de todo el mundo. Pues a lo largo de poco más de 20 años se han posicionado en el gusto de muchísimos indie-rockeros.
“Love Illumination” y “Michael” siguen poniendo a todos a bailar. Sobre todo a las mujeres que danzan sin cesar, dulce, descontrolada y alegremente, como si no hubiera un mañana. Como si esto nunca fuera a acabar. Como deberíamos vivir la vida siempre.
Lo cual se hace mucho más contundente en la ya súper clásica, de su primer álbum de estudio homónimo Franz Ferdinand, “Take Me Out”. Al terminar ésta, y aunque algunos en gradas ya estaban tomando sus asientos, el poder de “Ulysses” hace inevitable que tod@s en ‘El Domo de Cobre’ vuelvan a ponerse tod@s de pie.
“Outsiders”, con su toque de “Disco Inferno”, sigue provocando los mejores pasos de baile de varios de los miles aquí reunidos. Que con el liderato en las percusiones de Aubrey, se vuelven loc@s… pese a que acto seguido los Franz Ferdinand salen de escena entre vítores, chiflidos y, por supuesto, gritos.
Pero todo esto es sólo parte del show pues estos grandes escoceses regresan al Palacio de los Deportes para brindarnos un final que sólo puede ser memorable, bailable, delicioso y rockero.
Y así da inicio el principio del final, con “Billy Goodbye”. Seguido de otro hitazo de su primer LP, “Darts of Pleasure”, la cual desata los gritos más eufóricos de la noche.
“Jacqueline” no deja que los ánimos bajen. Pero es sin duda alguna “This Fire”, la suculenta cereza-rock en el pastel, LA canción que tod@s estuvimos esperando durante hora y media de una deliciosa velada de indie rock. Rock bonito, rock coqueto. Rock que sin pretensiones llega a mujeres y hombres por igual. Porque está basado en la realidad. En verdad. En la forma como el arte nació, creció y se desarrolló. Y que pese a la podredumbre de la industria musical mundial, no dejaremos que muera.
Por: Ángel Caballero (@AngelReject)
Fotos: Cortesía Ocesa y Especiales
“las mujeres que danzan sin cesar, dulce, descontrolada y alegremente, como si no hubiera un mañana. Como si esto nunca fuera a acabar. Como deberíamos vivir la vida siempre”…. Tengo 42 años y este fue mi primer concierto, me endeudé hasta el tuétano porque hubo que pagar avion, hospedaje y gastos…. y esa frase que pusiste me llegó hasta lo más profundo de la emoción, porque efectivamente, Love Ilumination fue una canción en trance que hizo que se me olvidara absolutamente todo, hasta el dolor infernal de pies que tenia jajajaja. La noche fue perfecta, el concierto sublime, la banda suprema y la raza a la altura.
No sabes lo bonito que siento al leer esto! Porque la verdad a veces entre tantos eventos empezamos a perder la noción del esfuerzo que significa para los verdaderos fans que, como tu, se esfuerzan física, mental y económicamente para disfrutar de un concierto que muchas veces parece sólo uno más entre varios. Por eso nuestra misión como medio de comunicación es acercar lo más posible a los que no pudieron estar ahí, y/o, hacerlos revivir estos grandes momentos. Te mando un abrazo fuerte, gracias por tomarte uno minutitos para leernos y ojalá podamos seguir en contacto para acércate más a otros conciertos que desafortunadamente no todos pueden presenciar físicamente =)