Que esta puesta en escena contenga un espíritu casi exclusivamente femenino, no sólo es garantía de inteligencia y calidad, sino de complejidad, contradicción, tragedia y comedia.
Así lo expresa todo su elenco (Sonia Franco, Maya Zapata, Zuria Vega y Mónica Dione), así como el dramaturgo, Chema Rodriguez-Calderón; sus productoras Samara Ibrahim, Ana Bracho y, también, Maya Zapata; y su directora, Lorena Maza.
“Desde hace años buscamos un texto potente y Feroces lo es, pues nos lleva por un divertido y tragicómico viaje. No es una obra femenina, es una obra universal. Lo importante es lo universal de la emoción humana”, asevera Ibrahim.
Por su parte, la directora Lorena Maza, expresa que esta representación actoral forma parte de una gama de obras que pueden aspirar a vivir del teatro sin necesidad de ser comerciales. Un equilibrio difícil de encontrar hoy en día que el teatro es uno de las bellas artes que más sufren para mantenerse en pie.
Y es ella misma quien define esta puesta en escena como una compleja, profunda y arquetípica relación, entre una madre (muerta) con sus hijas y la relación que entre ella mismas viven.
Feroces reúne, sin necesidad de hablar de un tiempo y lugar específico, a cuatro hermanas en un pequeño desván, quienes están en busca del testamento de su madre. Ahí vivirán un encierro en el que viajarán al pasado y al presente.
“Una hora con 45 minutos donde las hermanas se quedan rodeadas con recuerdos, vivencias y experiencias que las han herido de cierta forma, por eso tienen diferentes capacidades que las hacen ser feroces. Es un tour de force porque mantener una obra entre la tragedia y la comedia es un trabajo bárbaro”, especifica su directora.
Y son las misma protagonistas quienes describen a sus personajes:
Sonia Franco: Ana, ella por encima de cualquier otra cosa, ama a sus hermanas. Son sus mejores amigas, sus apoyos. Por lo que, de alguna forma, es el pegamento entre ellas. Es la más chiquita y la más twisted. Es darky, potente e intensa.
Maya Zapata: Marisa, las más irreverente la provocadora. Diciendo las verdades quiere hacer a su contrincante más fuerte. Simpática y frívola. Usa la comedia para disfrazar el dolor profundo que tiene.
Zuria Vega: Josefa Calderón, es una mujer que hace tiempo decidió que nada le iba a doler más, por lo que se ha dedicado a construir muros de distancia
Monica Dionne: Ruth, la hermana mayor, es quien estaba más cercana a la madre. Una madre terrible. Que al mismo tiempo, por ser de otro padre, estuvo más alejada de los juegos perversos y siniestros de las otras hermanas.
De esta forma, Feroces se convierte en una obra de teatro que no puede dejar indiferente a nadie. Por ello, sus mismas actrices, más allá de su papeles se han visto afectadas por los textos de la puesta ene escena.
Por ejemplo a Vega la ha hecho reflexionar en muchos sentidos, no sólo por la relación con su hermana Marimar Vega, por la cual asegura siente un amor que nada la sobrepasa. Sino que también la ha orillado a, saliendo de los ensayos, mandarle mensajes a su mamá de cariño por lo impactada que quedaba.
Además, a Sonia Franco y Maya Zapata las ha hecho reflexionar en torno a la violencia que se vive en México, tanto personal como social. “Vivimos en una época violenta (que vemos todos los días en la calle, la tele, los periódicos, películas, etcétera.), por lo que no ponemos atención en la violencia que hay en nuestra vida diaria.
“Por lo que ver una obra como esta, se transforma en un proceso de sanación, pues muestra una violencia intrafamiliar tan sutil que inevitablemente se convierte una bomba de tiempo”, concluye Franco.
Por: Ángel Caballero
Fotos: Marko Sauce
Feroces: 10 semanas en el Teatro Milán (Lucerna 64, esquina irán, colonia Juárez), del 1 de abril al 5 de junio. Los viernes a 20:30; sábados 18:00 y 20:00 horas; y domingos 18:00 horas. Costos: 330 y 380 pesos. Preventa con 30% de descuento.