Café Tacvba Fiesta y folclor en el Auditorio Nacional

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Café Tacvba volvió a demostrar en el Auditorio Nacional que son la banda mexicana más querida del país. Por eso le brindaron a su gente más de 2 horas de show a lo largo de 28 canciones, que viajaron por todos sus discos de estudio, en un formato íntimo, bello, diferente y unplugged.

Eso más pudimos vivir con Café Tacvba en la 1ª, de 4 fechas pactadas, con su público en la Ciudad de México. Por eso aquí te dejamos una crónica con todas las melodías que los han hecho tan populares, rarezas y covers que alcanzaron tales niveles de profesionalismo que algunas llegaron a ser mejores que sus versiones originales.

A las 20:41 horas las luces de ‘el Coloso de Reforma’ se van a negros. Y así, en las penumbras, ‘los Tacubos’ se van colocando en sus respectivos lugares, por supuesto, con su público gritándoles con todo el cariño posible y eso que “María” ni siquiera ha comenzado a sonar.

Las primeras notas de las guitarras acústicas de Quique y Joselo en “Diente De León”, bastan para que este recinto se vuelva a llenar de rugidos que contrastan con la dulzura de esta melodía.

Los hidrocarburos son los máximos protagonistas en “Trópico De Cancer”, una de las obras más descriptivas y longevas de Café Tacvba, del que es considerado por millones como su mejor disco RE.

“Que alegría compartir esta noche con ustedes. Relájense. Disfruten. Bailen. Deseamos que ustedes disfruten muchísimo”; confiesa Rubén Albarrán antes de que la fiesta siga con “El Metro”.

A continuación “Ciclón” hace ir y venir a Rubén sobre el escenario del Auditorio Nacional, que tiene a unos cuantos músicos extra, aunque seguramente a lo largo del concierto haya más.

Treintañeros, cuarentañeros (si no es que hasta cincuentañeros) en su inmensa mayoría, danzan alegremente de pie frente a sus butacas mientras suena “Bar Tacuba”.

“Las Flores” enciende, ahora sí, a absolutamente todo el Auditorio Nacional que está totalmente parado para gozar uno de los máximos clásicos en la historia del rock mexicano, así como de Café Tacvba.

Desde la primera fila a la última, del primer al segundo piso, y hasta en los balcones; se ponen a saltar y bailar “La Chica Banda”. La cual es tan especial e inolvidable, por sus mezclas de géneros musicales.

“La Muerte Chiquita” en compañía de una tambora estilo Banda El Recodo, ya no pone a bailar a tod@s los fanatic@s de Café Tacvba, pero sí cantan con mucha enjundia esta especie de balada regional mexicana.

Con la tambora aún en escena, una de las canciones relativamente más nuevas de ‘los Tacubos’, “Olita Del Altamar”, vuelve a prender a todos con esta oda a los océanos, ríos, mares y demás transmutaciones del recurso más importante del planeta Tierra, el agua.

El potente y enigmático inicio de “Futuro” basta para mantener fuertes y estruendosos los ánimos de l@s fans de Café Tacvba; que cambian de color, de azul fuerte a rojo carmesí, conforme el bombo cae una y otra vez al compás.

Ahora es el turno de que una maravillosa sinfónica acompañe a estos ‘Tacvbos’ dentro del ‘Coloso de Reforma’ con “El Aparato”, seguido de la incombustible “Locomotora”.

Toca el turno de otro enorme éxito de esta banda de sangre azteca “El Fin De La Infancia”, inspirada en una de las obras cumbres de José Emilio Pacheco Las Batallas en el Desierto. E, inmediatamente después, “Rarotonga” tiñe de morado el escenario, con destellos verdes, dándole otra vez un ambiente mucho más fiestero al Auditorio Nacional.

“Esa Noche” marca uno de los momentos más dramáticos de la noche. Pero la melodía es tan bella, que hasta este drama se goza a lo largo y ancho del Coloso de Reforma.

Un organillero se hace protagonista de esta noche especial con ‘los Tacvbos’, al hacer la introducción de “Mediodía”, y ahí se mantiene durante toda la canción hasta el final, lo cual provoca grandes aplausos a dicho personaje principal de las calles del Centro Histórico de la CDMX.

Nada más les falta aplaudir mientras se contonean para demostrar que son tíos, y tías, sin necesidad de decirlo. Y de hecho algunos lo hacen, dejando ver su “avanzada” edad, con la combinación tan de cabaret que hacen ‘los Tacvbos’ de “Outsider”.

“Chilanga Banda”, seguramente la canción con más ‘ches’ en el mundo entero, de la autoría del genio mexicano Jaime López, demuestran que la complejidad lírica no debe ser elitista sino todo lo contrario: entre más de calle, de barrio, más importante y audaz se es.

“Volver A Comenzar” es tan buena que Rubén es el que menos se luce. Son Joselo, Quique, Meme y, desde luego, la orquesta; quienes participan en diferentes partes de la melodía y cumplen una función primordial para hacer de esta gran canción algo extraordinario. Puesto que sus cambios de ritmo, voces e instrumentos; nos elevan a la estratosfera sin necesidad de bebidas espirituosas ni nada que se le parezca.

A coro, parejitos y sin gritar; los seguidores mas fieles de Café Tacvba se lucen cantando de pe a pa “El Puñal”. Y eso que lo mejor aún está por llegar. Pues para rematar esta rola que casi se convierte en mambo, todos ‘los Tacvbos’ dejan a un lado sus instrumentos y se ponen a bailar enfrente del escenario para sorpresa de tod@s.

Café Tacvba se va del escenario, para susto de algun@s, y es hasta después de algunos minutos que regresan con “El Espacio”. Trágica melodía en la que, una vez más Meme, se luce al máximo al transmitirnos con su voz y rostro dolor y melancolía.

“Esta que sigue es con todo nuestro corazoncito para nuestra tierra. Para el planeta”; asevera Albarrán antes de interpretar “Volcán”. También una canción relativamente nueva de ‘los Tacvbos’, y tal vez la que con más solemne dolor y respeto ha cantado Rubén en esta velada.

“Aviéntame” y “Eres”; 2 de las composiciones más románticas de Café Tacvba, fungen como descanso ideal para Albarrán y tomada de batuta de la particular e inconfundible voz de Meme.

Con sus respectivas guitarras como parejas de baile; Joselo, Quique y Meme danzan en la parte más linda y pegadiza de “Quiero Ver”, que da paso al ‘paparapapa euueeeoooo’ que desde el inicio del concierto los fans de ‘los Tacvbos’ clamaban por escuchar. Y es por ello que cuando “El Baile Y El Salón” suenan, tod@s revientan de felicidad y sigue danzando y cantando como si estas mas de 2 horas de espectáculo recién comenzaran.

Una pausa provoca que algun@s empiecen a salirse del Auditorio Nacional. Pero cuando los gritos regresan y las luces se vuelven a apagar; carreras de regreso al recinto se pueden manifestar. Pues una jarana basta para que estas 10 mil almas exploten de felicidad ante “Ojalá Que Llueva Café”, última canción del 1° de los 4 días de fiesta y folclor con Café Tacvba en ‘el Coloso de Reforma’.

Videos: Canal de Extensión en YouTube
Por: Ángel Caballero (@AngelReject)
Fotos: Cortesía Ocesa