Alain Giraudie nos sorprendio gratamente con El Extraño del Lago, ahora nos presenta con cierta tendencia hacia la abstracción narrativa en Animal Vertical, la cual se estrena hoy jueves de marzo bajo el sello de :ND Mantarraya en Ciudad de México, Toluca, Cuernavaca, Guadalajara, Monterrey, Cancún, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Morelia, Mérida, Xalapa y Tijuana.
De acuerdo a los comentarios de diversos críticos cinematográficos, creen que no parece casual que el director francés Alain Guiraudie haya elegido titular su nueva y majestuosa película con un concepto que remite al ámbito de la geometría: la verticalidad, que tiene que ver tanto a una cuestión espacial como a una cierta tendencia hacia la abstracción narrativa.
Animal Vertical arranca con el encuentro entre Léo el cineasta y Marie la pastora. Él, desde su desconocimiento de las leyes rurales, conserva una visión romántica de la vida campestre, pero ella es mucho más pragmática: ante la aparición del lobo, es necesario empuñar el fusil. Esta clara dicotomía entre ingenuidad y plena consciencia en la relación con lo real es de las pocos indicios que encontramos en el film de una estructura narrativa/conceptual rígida, o al menos sólida.
Con base en la visión de los conocedores del séptimo arte, creen que esta cinta es ajena a toda lógica convencional, aferrada a una escritura que trabaja, a partes iguales, con lo físico y lo abstracto, Animal Vertical propone al espectador un viaje absolutamente impredecible.
En ocasiones, se impone la ley de la elipsis más brutal y maravillosa: una dulce escena de cama entre un hombre y una mujer se interrumpe súbitamente para mostrarnos el parto del hijo de la pareja. Otra veces, florece el surrealismo: el protagonista viaja en bote por el río para ver a una terapeuta que le conecta, literalmente (vía unas pequeñas ramas que funcionan cual tubos sanguíneos), a la naturaleza.
Los personajes van acumulando vivencias pero no un trasfondo psicológico: se mueven como títeres del deseo, palpamos sus idas y venidas entre el campo y la ciudad, sus abrazos desesperados, sus encuentro sexuales, pero nunca llegamos a tener claras sus intenciones.
Diversos especialistas creen que la reciente cinta de Guiraudie es magistral y diferente a El Desconocido del Lago –aquella se concentraba sobre una historia y un lugar, esta funciona por dispersión–, en Animal Vertical el poderoso extrañamiento del relato contrasta con la naturalidad con la que se comportan los personajes, como hipnotizados por sus pulsiones afectivas y sexuales.
A las antípodas de la ortodoxia narrativa, la película toma una serie de lemas y fabrica en torno a ellos un frágil castillo de cartas; “querer ser padre sin la necesidad de una madre”, “entregarse a una voracidad omnisexual”, “ansiar la integridad artística y sufrir la pobreza”.
Ideas que mueven a los personajes en una suerte de procesión zombi que varios críticos relacionaron con el vértigo de aquella obra maestra llamada L’intrus, de la también francesa Claire Denis. Un vínculo que habla a las claras de la grandeza de lo nuevo de Guiraudie: una película sobre un hombre abrazado tierna y protectoramente a su bebé.
Redacción (@RevistaExt)
Fotos y Póster: Cortesías