Si te esfuerzas por hacer lo que te hace feliz encontrarás tu fuego interno. Bajo esa premisa parte Rock Dog, la película animada del director Ash Brannon, conocido por co-dirigir Toy Story 2.
En este largometraje se narra la historia de Bodi, un perro que, para seguir la tradición familiar, es entrenado para convertirse en el guardián de su aldea. Bodi no está satisfecho con la vida que lleva y no puede ignorar su pasión por la música, por ello deja su hogar en Villa Nevada para ir a la ciudad y que más personas conozcan sus canciones.
Un día, por casualidad escucha en la radio el mensaje de una leyenda del rock, un gato blanco y delgado llamado Angus, en donde el músico cuenta cómo se inició en el mundo musical y motiva a las y los escuchas a seguir sus sueños pese a las dificultades.
En el filme basado en la novela gráfica del músico asiático Zheng Jun, Tibetan Rock Dog, contrastan dos actitudes: la del inocente que se lanza en busca de una meta sin comprender del todo qué sucede, pero lleno de confianza y expectativas positivas, representado por Bodi; así como la de quien, basado en sus experiencias, asegura lo difícil que es incidir en ciertas áreas por lo que invita a resignarse y seguir sin siquiera intentarlo.
A través de una serie de ejemplos del por qué es importante no ceder hasta conseguir lo que se busca, la historia de Rock Dog muestra situaciones desarrolladas en los mundos urbanos y rurales de China, que hacen referencia a situaciones fuera de lo común que buscan ser chistosas, como las creadas por el artista visual y creador de muchos de los chistes de los Looney Tunes, Chuck Jones.
La película se estrenó a nivel nacional el 10 de marzo y es apta para todo público.
Por: Montserrat Antúnez Estrada
Stills y Póster: Cortesías